2005/08/18

Impulsos

Hoy ha caido una roca sobre almas. Algo comprime nuestros sentimientos haciendo que el impulso de la vida se torne oscuro, si las palabras al menos dieran ese consuelo que dicen que dan, esas palabras mágicas que hacen retornar la sangre al alma y deja que las manos puedan asir de nuevo las cosas, si al menos estos momentos pasaran y fueran tan poco recordados como los parpadeos... VIDA, VIDA, VIDA, el alma desgarrada por lo que se pierde, tremenda sensación de injusticia, de sin razón pero... la vida no tiene razón, es tan solo un impulso y al cual hay que enfrentarse rompiendo los moldes de nuestros sentimientos. Impulso, impulso, impulso, si no tiene más que darme pues recibo tu dolor como recompensa. Que me entierren con el alma deshecha y palpitando, no quiero abandonar lo que empiezo por rememorar lo que fueron, cada hoja, cada partícula de polvo, cada suspiro, cada llanto, cada compañía.

2005/08/12

Destino


“El destino. ¡Mi destino! La vida es una bufonada: esa disposición misteriosa de implacable lógica para un objetivo vano. Lo más que se puede esperar de ella es un cierto conocimiento de uno mismo, que llega demasiado tarde, y una cosecha de remordimientos inextinguibles. Yo he luchado a brazo partido con la muerte. Es la disputa menos emocionante que podáis imaginar. Tiene lugar en una indiferencia impalpable, sin nada bajo los pies, sin nada alrededor, sin espectadores, sin clamor, sin gloria, sin el gran deseo de la victoria, sin el gran miedo de la derrota, en una atmósfera enfermiza de tibio escepticismo, sin demasiada fe en tu propio derecho, y todavía menos en el del adversario. Si tal es la forma de la sabiduría última, entonces la vida es un enigma mayor de lo que la mayoría de nosotros cree. Estuve a menos de un paso de la última oportunidad de pronunciarme, y descubrí con humillación que probablemente no tendría nada que decir.”

“El corazón de las tinieblas”. Joseph Conrad